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Consulta Pública del Anteproyecto de Ley para la Modificación de la Ley 28/2005: Un Cambio Decisivo para el Comercio del Tabaco

La reciente consulta pública sobre el anteproyecto de ley que propone modificar la Ley 28/2005 no es un evento aislado. Forma parte de una hoja de ruta más amplia impulsada por el Ministerio de Sanidad, el Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo (PIT) 2024-2027, que tiene como objetivo principal la reducción drástica del consumo de tabaco y sus derivados en España. Este plan, iniciado con la consulta pública para modificar el Real Decreto 579/2017, que comenzó este mes de abril, establecerá una serie de actuaciones destinadas a transformar el marco regulador de la industria del tabaco en los próximos años, con un impacto significativo en los establecimientos comerciales.

Los Cambios Propuestos: Más Allá del Tabaquismo Tradicional

El anteproyecto de ley actualmente en consulta pública tiene como objetivo ampliar las restricciones actuales, no solo para los productos del tabaco, sino también para nuevas formas de fumar que han ganado popularidad recientemente, como los cigarrillos electrónicos. Estas intenciones están dirigidas a prevenir el aumento del consumo de estos productos, especialmente entre los jóvenes, que constituyen una preocupación prioritaria para las autoridades sanitarias.

Las propuestas también incluyen restricciones más estrictas en la publicidad, la promoción y el patrocinio de productos relacionados con el tabaco. Se busca reducir la visibilidad de los productos y limitar la exposición de la población, especialmente de los jóvenes, a mensajes que podrían normalizar o incentivar el consumo. También se prevé la ampliación de las zonas donde se prohíbe fumar, lo que podría afectar la ubicación y el funcionamiento de determinados establecimientos.

El Rol de los Estancos en la Protección de la Salud Pública y la Lucha Contra el Mercado Ilegal

Los estancos desempeñan un papel esencial en la protección de la salud pública y la lucha contra el mercado ilegal. Son responsables de garantizar que los productos de tabaco se vendan de manera regulada y segura, ayudando a prevenir el acceso de los menores a productos de tabaco, así como a nuevas formas de fumar como los vapeadores. Su compromiso con el cumplimiento de las leyes que prohíben la venta a menores es fundamental para proteger a las nuevas generaciones de los riesgos asociados al consumo de tabaco y otros productos similares.

También contribuyen significativamente a la protección de la salud de los consumidores al asegurar que los productos cumplan con los estándares de seguridad y calidad establecidos por las autoridades sanitarias. Este control es crucial para evitar que productos de baja calidad circulen en el mercado. La lucha contra el comercio ilegal es otra responsabilidad importante, ya que este mercado no solo amenaza la salud pública, sino que también provoca una pérdida significativa de ingresos fiscales para el estado.

El Futuro de los Estancos: Un Servicio Público en Evolución

Los estancos han ampliado su oferta más allá de la venta de productos del tabaco para incluir una gama creciente de servicios como el pago de recibos, el envío y retirada de dinero, recargas de transporte, así como la venta de productos de primera necesidad y servicios de paquetería. Esta diversificación los convierte en puntos clave en la vida cotidiana de los ciudadanos, facilitando el acceso a servicios esenciales y consolidando su papel como comercio de proximidad y servicio público en las áreas locales.

Participación y Adaptación: Claves para el Futuro

En este contexto, es fundamental que los profesionales del comercio del tabaco hagan oír su voz e influyan en el desarrollo final de la legislación. La UPELL, con su implicación en ambas consultas, continúa defendiendo los intereses del sector, asegurando que las preocupaciones de los establecimientos sean escuchadas y consideradas para garantizar que la nueva normativa tenga en cuenta las realidades del mercado y las necesidades de los profesionales.

Estar preparados para los cambios legislativos es esencial. Los establecimientos deben mantenerse informados sobre el progreso de las nuevas normativas y comenzar a planificar cómo se adaptarán a los nuevos requisitos. El éxito en este nuevo escenario dependerá de la capacidad de los establecimientos para responder de manera rápida y efectiva a los cambios previstos.

Las nuevas normativas representan un desafío importante para el comercio del tabaco, pero también una oportunidad para reflexionar y ajustarse a una realidad en constante cambio. Los estancos deben ser proactivos y adaptarse a los nuevos requisitos para asegurarse de que puedan seguir operando con éxito en este nuevo contexto regulador. Además, deben continuar demostrando que son un muro de contención esencial para evitar que los menores tengan acceso al tabaco y a los nuevos productos emergentes, mientras refuerzan su papel como servicio público y comercio de proximidad, contribuyendo así a la protección de la salud pública y al bienestar de las comunidades locales.